¿Dónde está la crisis?

Dicen que la crisis está entre lo que somos y lo que hacemos.

Entonces la pregunta es: 

¿Qué distancia hay entre estos dos puntos?

La distancia puede ser eterna o medio centímetro. Eso depende de donde estemos paradas hoy y a dónde esté situada la vida que queremos de ese punto. Para tener la vida que queremos, primero tenemos que ser las personas que queremos. Con la base de quienes somos, vamos a poder construir lo que venga.

El punto es cuando en ese camino, aparecen las crisis disfrazadas de múltiples razones. Las cosas no salen como esperamos, perdemos amores, vínculos, contactos, sueños, proyectos y lloramos. Nos quejamos, empezamos a teñir nuestros días de negro y es ahí, donde el poder de controlar los pensamientos, vuelve a jugar un papel fundamental en la película de tu vida. Una voz grave y cizañera te persigue recordándote las miserias que existen y las que podrían existir. Es la encargada de prepararte los escenarios más nefastos, esos que si te crees, te angustian y te generan dolor, aun cuando todavía no los viviste.

Peroooo, por el otro lado aparece una voz de paz y de calma. Más bajita, si no haces algún esfuerzo no la vas a poder escuchar. Y escucharla, no determina tus acciones con tanta fuerza. Al menos al principio, al menos hasta que tomes consciencia de que lo que suceda, va a depender de a quien escuches.

Las crisis son inevitables, igual que el dolor, la frustración y unas cuantas emociones displacenteras que nos asaltan y nos complican la vida. Ahora, que vas a hacer en ese asalto? ¿Cuál va a ser tu actitud ante ellas?

Tu actitud determina tu destino. Te voy a copiar un retazo de mi guía de motivación “Reinventá tu vida”, dónde explica en detalle esto que te estoy contando acá.

“Cuidá tus pensamientos, porque se convierten en palabras.
Cuidá tus palabras, porque se convierten en acciones.
Cuidá tus acciones, porque se convierten en hábitos.
Cuidá tus hábitos, porque se convierten en tu carácter.
Cuidá tu carácter, porque se convierte en tu destino.”

— Lao Tze

La invitación de hoy es que puedas achicar la brecha entre lo que sos, y lo que queres ser. Conocerte, para después alinearte.

Alinearte para crear, vivir y soñar.

Y no sólo vos, cuándo logras salir de la crisis, también salen de ella tus personas más cercanas, que suelen ser, las más queridas. y acá es justamente dónde reside la importancia de cuidarte, crecer y ser mejor todos los días. Por vos, pero también, por ellos/as…. que están ahí, mirándote y aprendiendo de vos 🙂

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